Translate

lunes, 27 de agosto de 2012

Tomates, parte 2, composición y tipos


Los conocidos tomates (Solanum lycopersicum) pertenecen a la familia de las Solanáceas. Proceden del Perú. El número de variedades de esta solanácea que existe en España es muy grande, en correspondencia a la intensidad con que es cultivado. Las más importantes son: la corriente, de tamaño medio (5 a 10 cm), comprimidos por los planos superior e inferior; el redondo, bastante pequeño (2-3 cm) de carne muy apretada; el oblongo, piriforme; el monstruo, notable por su tamaño, que puede alcanzar pesos de hasta 1kg, que presenta un rodete ceniciento alrededor de pedúnculo: las variedades grande temprana, grande tardía, albaricoque temprano y tardío, de Levante, etc…
                Se ha descubierto en los tallos y hojas de odas las plantas de tomate una sustancia antifúngica, la “tomatina”, que no sólo impide enfermedades vegetales, sino que actúa sobre el hongo filamentoso que produce en el hombre la enfermedad de la piel “pityriasis versicolor”. La sustancia también demuestra ser un material básico útil para una serie de productos medicinales de gran valor de la serie de productos hormonales (cortisonas, etc.)

Composición

Según Dahlen, contiene en cada 100g de pulpa fresca y secada al aire 92,37% de agua, 1,25% de elementos nitrogenados,  0,84% de lignina y 0,63% de cenizas. Se le reconocen además solanina, saponinas, colorantes y vitaminas, especialmente A.
                El tomate fresco contiene tan abundante cantidad y variedad de vitaminas que pocos alimentos vegetales pueden comparársele, sobre todo en cuanto a vitaminas A,B,C, E.
                El  contenido en materias minerales está a la altura de la mayoría de las hortalizas de hojas y tubérculos, pero cuenta además con elementos rara vez presentes en éstas, como sin: radium, hierro, cobre, boro, níquel y cobalto. El contenido en vitamina E, justifica acaso la antigua denominación del tomate como “manzana erótica”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario